Informe de Cofavi sobre La Masacre de Wilde y su relación
con el Caso Schiavini
17 de Junio de 2002
El 10 de Enero de
1994, varias patrullas pertenecientes a la Brigada de Investigaciones
de Lanús y de comisarías de la zona, perseguían
a dos coches iguales disparando a mansalva y matando a 4 personas con
mas de 200 disparos. 10 de ellos se encontraron en el cuerpo de Edgardo
Cicutín, que fue ejecutado una vez que había bajado del
auto con las manos levantadas. Después se sabría que los
policías se habían equivocado, ya que buscaban a un auto
parecido donde irían los delincuentes buscados. Han pasado mas
de 9 años desde aquélla terrible masacre que se llevó
la vida de varios inocentes, entre ellos, Edgardo Cicutín y Norberto
Corbo. Sus madres, miembros de nuestra institución, COFAVI, esperan
todavía que se haga justicia.
En el año
94 , precisamente en el mes de Noviembre, la Sala primera de la Cámara
de Apelación en lo Criminal y Correccional de Lomas de Zamora,
integrada por los camaristas, DEVOTO-SILVESTRINI Y BACCINI, decide dejar
en libertad a los policías acusados de matar a 4 hombres inocentes,
ya que consideraba que no eran responsables de dichas muertes, atribuyéndole
las mismas al suboficial prófugo, Marcos Ariel Rodríguez.
Por lo tanto el comisario César Córdoba, el subcomisario
Roberto Mantel, los oficiales Hugo Reyes, Marcelo Valenga, Julio Gatto,
y los suboficiales Osvaldo Lorenzón, Pablo Dudeck, Mariano González,
Eduardo Ismael Gómez, Américo Lorenzón y Carlos
Saladino fueron liberados en forma provisional y así se encuentran
desde entonces.
La causa en una
primera instancia fue investigada por la jueza Silvia González,
quién destacó las mentiras y contradicciones de los acusados;
se había iniciado una minuciosa investigación y a pedido
de los policías, la causa pasó después de esta
triste sentencia al juez Rafael Emilio Villamayor, (juzgado nº
8 en lo penal de Lomas de Zamora) quién no ha hecho nada en todos
estos años. Demostrando con su actitud, desidia y complicidad
con los agentes de seguridad acusados por este hecho.
En aquél
entonces se comentó que el ex comisario Ribelli habría
pagado alrededor de 400.000 dólares a la Cámara l, para
que en forma arbitraria y sin haber leído toda la causa dictara
esta resolución. También se dijo que el pago habría
servido para que los médicos forenses acusados en el Caso Schiavini
de falsificación de autopsia y ocultamiento de pruebas, también
fueran afectados por una resolución que los sobreseyó
definitivamente, cuando todavía no había fecha para el
juicio oral y público y por lo tanto nosotros entendemos que
correspondería un sobreseimiento provisorio hasta la llegada
del juicio que se llevó a cabo en el año 97. (Un juicio
abominable y lleno de irregularidades, llevado a cabo por la Sala lll
integrada por los Camaristas Amoroso, Decastelli y Tristán Rodríguez)
Amoroso se excusó debido a que había sido el juez instructor
de la causa principal.
Por lo tanto la
Sala l, favoreció a policías y médicos forenses
del poder judicial y policial. Al mismo tiempo y en la misma fecha,
tampoco la Sala primera se tomó el trabajo de leer la causa de
los médicos acusados y, en muy pocos días, los jueces
Devoto, Silvestrini y Baccini actuaron negligentemente, impartiendo
injusticia y riéndose de todas las víctimas y de sus familiares.
Todo el tema del dinero pagado a esta Sala, estaría en las escuchas
telefónicas que el Juez Galeano tiene en su poder por el caso
de la Amia. Escuchas del año 94 aproximadamente entre Agosto
y Noviembre del mismo año.
En aquellos momentos
todos sabíamos que esto había pasado, pero no teníamos
las pruebas necesarias para denunciar el accionar de estos jueces y
policías corruptos. Por este motivo la mamá de Sergio
Schiavini y los Familiares de Corbo y Cicutín en forma separada,
denunciaron y pidieron el Jury de Enjuiciamiento para la Sala l. Hasta
el día de hoy no se ha recibido contestación de la Procuración
o de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia. Según el procurador
de ese momento, estos jueces contarían con cerca de 12 pedidos
de Jury por diversas causas. Ninguno llegó hasta el final y jamás
fuimos notificados sobre este asunto. Hoy todos ellos retirados, fueron
acusados por un programa de investigación en la TV Argentina
de cobrar jubilaciones de privilegio. Se acusó a Silvestrini
y Baccini, sería bueno que se investigara todo esto para que
los corruptos sean descubiertos y la sociedad vea que alguién
paga por lo que hizo.
Debemos destacar,
que el hoy, juez Villamayor, que lleva la causa de la Masacre de Wilde,
fue secretario del Dr. Marcelo Darío Soukop (juzgado en lo penal
nº 5) cuando se tramitaba en ese juzgado la causa contra los médicos
acusados, en el caso Schiavini y también fue fiscal en la causa
principal, donde se investigaba el asesinato del mismo, en el juzgado
nº8, a cargo del Dr. Gustavo Amoroso. Este juez fue ascendido después
a Camarista de la Sala lll. También queremos hacer notar que
el abogado de los policías en la masacre de Wilde, Dr. Lorenzo
Fraiese, participó también en la defensa de los policías
del Caso Schiavini, junto a otros más.
El Dr. Marcelo
Darío Soukop, hoy ascendido a camarista, lleva a cabo en estos
momentos un juicio civil, por daño moral, contra el Diario La
Unión de Lomas, los periodistas Alejandro Córdoba y Oscar
Padrón y contra la madre de una víctima, la Señora
María Teresa Schnack de Schiavini, pidiendo como reparación
250.000 pesos. El juicio que comenzara el 10 de Abril de 2002, quedó
paralizado en el mes de Mayo y seguió a partir del 4 de Septiembre.
Hoy Febrero de 2003,
las partes esperan la resolución de esta absurda demanda, mientras
tanto, todos los acusados por este juez, tienen sus bienes inhibidos
y ha generado una nueva sensación de desprotección hacia
la mamá de Sergio, quién después de casi 12 años
de luchar para llegar a la verdad, debe enfrentar este nuevo desafío
que le depara la Injusticia Argentina. Este Juez y todos los demás,
están denunciados en la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos de la OEA y el caso ha sido declarado admisible por la misma.
Jueces, policías,
médicos forenses y abogados, se entrecruzan en casi todos los
casos, generando una ola de impunidad y desconcierto que nos ha llevado
al colapso de las instituciones. Todos ascienden en sus puestos, pisando
los cadáveres de nuestros queridos e inocentes hijos.y familiares.
Pedimos por lo tanto, que se pida la causa de Wilde,al juzgado nº
8 del Dr. Villamayor ,para investigar las irregularidades cometidas
en este caso.
POR COFAVI.
María Teresa Schnack de Schiavini
Cofundadora y Miembro de la Comisión Directiva.