FERNANDO
HORACIO
GIOVANELLIFernando tenía 29 años. El 17 de Octubre de 1991, salió de su casa, ubicada en pleno centro de la ciudad de Quilmes, para dirigirse a la casa de unos parientes situada a unas 15 cuadras de su vivienda, también en el partido de Quilmes, con el fin de atender a uno de sus tios que se encontraba en estado de invalidez. Fernando era letrista, tenía novia y pensaba casarse pronto, mientras tanto vivía en la casa de sus padres. Esa noche , después de bañarse y comer algo, salió como siempre a atender a su tio enfermo, sin pensar que como otros, jamás regresaría a su hogar. Jamás podría concretar sus sueños y proyectos, otra vida joven arrebatada por los violentos de siempre.
A escasos metros de su casa, en la intersección de las calles 25 de Mayo e Hipólito Irigoyen, Fernando es detenido por un móvil policíal perteneciente a la Comisaría 3º de Quilmes de la Provincia de Buenos Aires.
Los agentes policiales lo detuvieron y le solicitaron que se identificara con sus documentos personales, cosa que resulta imposible, ya que Fernando no los traía consigo. Ante esta situación, Fernando discute con los agentes policiales, quienes lo arrestan y lo trasladan en un móvil sin identificación policial hasta la sede de la Comisaría Tercera de Quilmes, Fernando es brutalmente golpeado en dicha sede, sita en 12 de Octubre y Gran Canaria, y de allí es trasladado hasta la ubicación del Puente 14 de Agosto (Partido de Quilmes), a pocos metros de la Comisaría.
Fernando es arrojado a la vereda y asesinado por uno de los agentes policiales, con un disparo de arma de fuego en la cabeza ( con ingreso en el lóbulo de la oreja izquierda). Posteriormente, su cuerpo es trasladado hasta la zona conocida como “Villa Los Eucaliptos”, ubicada en la avenida La Plata de Quilmes, lugar que si bien es lejano, respecto de dicha comisaría, igual pertenece a la jurisdicción de Quilmes. El cuerpo es acomodado aproximadamente , dos horas y media después de su muerte, frente a la citada “villa miseria”, el mismo aparece en la vereda de la vivienda identificada con el Nº 52 de la Avda. La Plata, entre las calles Jujuy y Lamadrid.
“Hechos acontecidos en la casa de Fernando el día de su muerte: A las 13,20 hs. del día17 de Octubre de 1991, en la calle 25 de Mayo 92, domicilio de Fernando, a través del portero eléctrico, una voz de sexo masculino, que se reporta como agente de la Comisaría 3º de Quilmes, solicita a la Flia. Giovanelli, una dádiva muy onerosa con el objetivo de mejorar el patrullaje de la zona. La respuesta de Ana Ramos de Giovanelli (madre de Fernando) respecto de este requerimiento es negativa y se pone muy mal.” ¿Es posible que una vida valga tan poco?
La causa penal recae en el juzgado del Dr. Carlos Armando Rousseau, juez que venía cuestionado por el caso Budge de Lomas de Zamora.
Fernando fue torturado y asesinado en un lugar distinto donde se encontró su cuerpo, la segunda autopsia demuestra las torturas recibidas por la víctima.
En esta causa, como en todas las demás la inacción de la justicia y la connivencia policial para ocultar pruebas, es obvia y generalizada, cuando agentes pertenecientes a la Bonaerense son acusados de asesinato y violaciones de los derechos fundamentales del hombre.
El ex Comisario, Héctor Omar Amado, tiene mucho que ver con este crimen, llegó a torturar a un menor para que declarara a favor de la policía en el caso Giovanelli, también fue comisario de Lomas de Zamora después de éste hecho, vino a reemplazar a Osvaldo Trama, Comisario comprometido en el asesinato del poeta Sergio A.Schiavini, ya que su hijo, Hernán Trama, fué uno de los 16 policías procesados por este caso.
O sea, Trama fue trasladado a otro destino (San Isidro) después de la muerte de Sergio, y Amado también, nunca imaginamos que lo mandarían a Lomas después de la muerte de Fernando, así nos enteraríamos que los comisarios comprometidos en estos crímenes, pasarían de un lugar a otro, llevando consigo, la sangre inocente de nuestros queridos hijos.
Esta causa , pasó, como todas las demás por las manos de 11 jueces y varios funcionarios incompetentes y estuvo paralizada mucho tiempo, hasta que llegó a COFAVI, no hay procesados ni detenidos en la misma, al igual que en el caso de Gabriel Santillán. Es por eso que nuestra Organización decide trabajarla con nuestros abogados y presentarla ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, cosa que hace el 5 de Junio del 2000, la misma es aceptada inmediatamente y abierta con el Nº 12.298, estos son los números con que las causas se tramitan ante la OEA.
Esta causa es declarada admisible en La Comisión Interamericana, con sede en Washington DC, el 22 de Febrero de 2001, habiendo pasado el escollo más grande para llegar a la verdad y desde ahora se inicia una nueva etapa en la cuál el Estado Argentino tendrá que responder a una Comisión Internacional, por las diferentes violaciones al Pacto de San José de Costa Rica.
En Febrero de 2003, se inician en Cancillería, las audiencias para tratar de llegar a una posible solución amistosa entre las partes.
Queremos dejar aclarado que todas las causas que Cofavi presentó ante la OEA después del caso Schiavini, llevan la firma de nuestra Organización (COFAVI), la misma es reconocida y respetada a nivel mundial..
Artículos violados en este caso: ART.4 ( DERECHO A LA VIDA ),
5 ( DERECHO A LA INTEGRIDAD PERSONAL ), 8 ( GARANTIAS
JUDICIALES) Y 25 ( DERECHO A LA PROTECCIÓN JUDICIAL)
EN RELACION CON EL ART. 1.1 ( DEBER DE RESPETAR LOS
DERECHOS DE LA CONVENCIÓN AMERICANA SOBRE DERECHOS
HUMANOS)
La mamá de Fernando forma parte de la Comisión Directiva de COFAVI, y está con nosotros desde los inicios de la Organización.
Tel. (5411) 4253-3965
